Gestiona tu ego

51. gestiona tu ego¿Tienes a tu ego bajo control? ¿No? ¿A qué esperas? Aprende a gestionar tu ego o vas a tener y a provocar muchos problemas.

Si tienes dudas acerca de tu presunta egolatría te animo a que te pongas ante un espejo. Mírate durante unos minutos. Obsérvate despojado de tus posesiones. Mira tus propios ojos, tómate un tiempo a solas contigo mismo. Focalízate en tus ojos y en tu mirada. Mírate, dices mucho más con tu mirada que con tus palabras, logros, tarjetas, títulos, compañías o posesiones.

Detrás de un ego descontrolado suele haber un complejo de inferioridad, problemas de autoestima o una necesidad continua de reconocimiento. ¿Es tu caso? Si es tu caso te animo a que sigas leyendo. Las personas dominadas por su ego son esclavas del reconocimiento sea real o aparente; pero es más, los ególatras se precipitan en sus juicios, se equivocan más, justifican sus errores y menosprecian a las personas que les rodean.

Créeme, gestiona tu ego, porque si no lo haces tú, vendrá cualquier avispado a gestionarlo por ti. Nada te hace más vulnerable que necesitar poder y reconocimiento

Créeme, gestiona tu ego, porque si no lo haces tú, vendrá cualquier avispado a gestionarlo por ti. Nada te hace más vulnerable que necesitar poder y reconocimiento; ya que para sentirte importante serás capaz de mentir, confiar en quien no debes y utilizar tu pequeña parcela de poder de una manera perversa. Hay millones de personas expertas en fabricarte y ofrecerte el traje del emperador que necesitas. ¿Recuerdas la ilustrativa fábula?

Gestiona tu ego, serás más feliz y, lo más importante, serás libre. Si eres capaz de controlar tu ego te liberarás de las cadenas de la necesidad continua de aparentar y de ser reconocido

Gestiona tu ego, serás más feliz y, lo más importante, serás libre. Si eres capaz de controlar tu ego te liberarás de las cadenas de la necesidad continua de aparentar y de ser reconocido; dormirás en paz, no necesitarás tener el mejor coche, la casa más grande, la pareja más espectacular, la adulación de tus empleados, el reconocimiento de tus padres y la admiración de las personas que te rodean a cualquier precio.

Si ganas en humildad y humanidad te sentirás mejor, créeme, empieza a gestionar tu ego antes de que sea demasiado tarde. La admiración que consigues es efímera y en muchas ocasiones aparente y superficial. Cambia de estrategia. Disfruta, sonríe. Estoy elaborando una teoría. Algún día me pondré a investigarlo en profundidad, pero de momento tengo la impresión de que la gente que sonríe más, pero la que sonríe sinceramente, es menos agresiva, más respetuosa, vive más feliz, descansa mejor y es más respetada. Ah quizás el problema es este, quizás estés confundiendo respeto con admiración. La admiración se puede comprar el respeto no.

Siguiendo con mi teoría, creo que estoy confirmando que las personas que tan solo piensan en ellos y en como hacer que el mundo gire a su alrededor, se sienten más infelices, son más agresivas, más intolerantes, buscan el conflicto, se sienten más solas y necesitan más bienes materiales para conseguir momentos de aparente felicidad que consigan compensar su incapacidad para vivir la vida de una manera constructiva, prosocial y solidaria.

Hazme caso. Gestiona tu ego. Ponte ante el espejo y mírate a los ojos. Después sal a la calle y mira humildemente a tu alrededor. Mira a las personas que tienes cerca a los ojos. Míralos y gánate su respeto…

Transforma tus intenciones en acciones

50. intenciones en accionesIba a ponerme. No si ya lo se, pero es que no puedo. Mañana me pongo. El lunes empiezo. Este año sí.

¿Por qué motivo nos cuesta tanto hacer lo que decimos?

En primer lugar tienes que plantearte si realmente quieres hacerlo. A veces decimos cosas o nos planteamos objetivos o retos por presión social. Tengo que estudiar tal cosa, correr tal carrera, dejar de comer tal alimento, visitar a tal persona o ir de vacaciones a tal lugar. Continuar leyendo «Transforma tus intenciones en acciones»

Tu también podrías ser un corrupto en potencia

49. corrupto en potenciaNo te escandalices, no pongas esa cara, tu también podrías ser un perfecto corrupto. ¿Coges folios de la oficina? ¿Pagas la gasolina de tu coche particular con la tarjeta de empresa? ¿Te dejas hacer regalos por proveedores de tu empresa?

He de admitir que no es un tema muy estudiado por la psicología ya que estamos ocupados estudiando otras cosas, pero algo sabemos sobre los motivos que llevan a una persona a cometer un delito. No obstante, si algún colega desea profundizar en este campo siempre puede venir a España donde encontrará material fresco y variado.

¿Qué conduce a una persona a ser corrupta? Continuar leyendo «Tu también podrías ser un corrupto en potencia»

La mala leche mata

47. la mala leche mataCuidado, la mala leche mata. El mal humor se cobra vidas. La ira te ganará la partida. Sin ningún tipo de dudas las emociones negativas como la ira, la hostilidad o la ansiedad tienen un efecto negativo en nuestra salud. Nuestro sistema nervioso está estrechamente relacionado con el sistema inmunitario y el sistema endocrino. El esquema de cómo influyen nuestras emociones en la salud es relativamente fácil de explicar. Cuando sientes una emoción intensa podrás notar como se desequilibra tu cuerpo. Si recuerdas, analizas o te analizas podrás ver cómo cuando te pones nervioso se te acelera el pulso, se entrecorta la respiración, te sube la presión arterial, te tiemblan las manos, empiezas a sudar y unos cuantos síntomas más. Las emociones provocan unos cambios fisiológicos y hormonales que inciden en nuestro sistema inmunitario afectando a nuestro cuerpo en su totalidad e incrementando las probabilidades de sufrir alguna enfermedad. Continuar leyendo «La mala leche mata»

Homenaje a los maestros

44. homenaje a los maestrosDebo admitir que mi idea inicial era la de crear un decálogo para reconocer a un buen maestro; pero que he decidido transformarlo en mi más sincero homenaje a la figura del maestro.

Un maestro es un compendio de virtudes. Un maestro es una persona valiente, que acepta el reto desde la humildad, sabiendo que lo realmente importante es que su alumno aprenda las competencias, conocimientos y habilidades necesarias para poder vivir libremente y en paz.

Un maestro es honesto consigo mismo y sabe que es más importante aprender que enseñar. Un maestro aprende más que enseña; se forma, lee y estudia para poder ofrecer conocimientos fiables y válidos a sus alumnos.

Un maestro es una fuente de inspiración sin fin; inspiración que nace de su ilusión, de su vocación, de su talento, de su amabilidad y de su amor por su profesión. Si profesión, porque un maestro no va a trabajar, un maestro va a disfrutar. Cuando un maestro enseña entra en un estado trance en el que canaliza su máxima atención y todos sus recursos para que sus alumnos aprendan. Cuando un maestro entra en el aula se concentra en sus alumnos, en nada más que en sus alumnos, en entenderlos y en ayudarlos.

No se puede ser un buen maestro si no se es capaz de amar. El maestro ama a su profesión, ama a sus alumnos y ama a las personas que han confiado en él para que eduque a sus hijos; y es éste amor, lo que hace que su trabajo se convierta en arte. No podremos amar si no somos sensibles, si no tenemos un alma compasiva y sin un espíritu receptivo y humilde.

Un maestro es consciente de la responsabilidad que tiene sobre sus alumnos. Un maestro sabe que cada pequeño gesto es observado por todos y cada uno de sus alumnos y asume esta responsabilidad con grado, siendo consciente de que es un modelo para sus alumnos.

A lo largo de mi vida he disfrutado de maestros que entendían la diversidad, la respetaban y la atendían. Cada alumno tiene un ritmo diferente, unas virtudes diferentes y una manera de aprender diferente. El maestro es capaz de reconocerlas y darles la respuesta que están esperando para que todos puedan florecer.

Un maestro puede ver las necesidades de sus alumnos y es capaz de transformar una alma desorientada en un torrente de fuerza y energía. A menudo, muy a menudo, tan solo necesitamos que nos miren, que nos lean, que nos entiendan y que nos den una dirección a seguir. No la dirección que más le conviene al maestro, o a unos padres… sino la dirección que más nos conviene a nosotros, en función de nuestras necesidades y virtudes.

Me gustaría reconocer el mérito de aquellos maestros capaces de estimular la curiosidad y el amor por el aprendizaje de sus alumnos. Citando a Horace Mann, el maestro que intenta enseñar sin inspirar en el alumno el deseo de aprender, está tratando de forjar un hierro frío.

A lo largo de mi vida, en la escuela, en el instituto o en la universidad, he tenido muchos profesores y algunos maestros. Los maestros están enfocados en sus alumnos, los profesores están enfocados en ellos mismos. Para un maestro lo más importante es su alumno y el proceso de enseñanza y aprendizaje. Para un profesor lo más importante es su figura y su necesidad de reconocimiento.

Animo a que los profesores se conviertan en maestros. Les animo a que hagan un ejercicio de autocrítica y a que miren a su alrededor, a que busquen a los maestros que tengan cerca y que les pidan con humildad que les ayuden a ser como ellos.

#gente maravillosa

43. gente maravillosaCorruptos, estafadores, ladrones, prevaricadores y mentirosos tienen un espacio en los medios de comunicación y una notoriedad que no se la merecen.

¿Dónde quedan las noticias que hablan de personas virtuosas? Hace unos días me invitaron a dar una charla sobre el impacto de la gestión emocional en situaciones de rescate y emergencias. Desde el escenario podía contemplar los diferentes colectivos que actúan en situaciones de emergencia. Bomberos, unidades especiales de diferentes cuerpos de seguridad, enfermeras, médicos y pilotos de helicóptero entre otros perfiles son los encargados de rescatarnos y atendernos en caso de emergencia. Creo que jamás había tenido un auditorio tan virtuoso. Continuar leyendo «#gente maravillosa»

Gente tóxica

42. gente tóxicaUna persona tóxica no te quiere, no te respeta y no te escucha. Sí, has leído bien, no le importas lo más mínimo, en absoluto, nada… Para una persona tóxica no eres más que un simple instrumento al servicio de sus intereses.

¿Crees que sabes identificar a una persona tóxica? Posiblemente no sea así. Ten cuidado con las buenas personas, ten cuidado con las víctimas de un mundo que no les comprende, vigila con las personas que invierten mucho tiempo en proyectar una imagen positiva de ellas mismas. Ten cuidado sea quien sea: tu madre, tu padre, tu profesor, tu pareja, tu hijo, tu hermano, tu compañero de trabajo, tu vecino o tu jefe pueden ser personas tóxicas.

Una persona tóxica necesita estar cerca de su víctima y no la debes ver venir. ¿O de que manera podría captar tu confianza y eliminar tus defensas? ¿Quién desconfía de una cándida e ingenua buena persona? ¿Quién no siente el deseo de ayudar a una pobre víctima? Es posible que hagan cosas por ti, pero cuidado. Como decía Cicerón, quien hace el bien por un interés es una persona astuta, que no buena. No te confundas. Continuar leyendo «Gente tóxica»

Siempre es mejor preguntar que suponer

40. mejor preguntarYo defiendo que es mejor preguntar que suponer. Recuerdo el caso de un cliente que me preguntaba el motivo por el que su hijo realizaba determinados comportamientos. Recuerdo como le indicaba que yo no era la persona adecuada para ser preguntada, que le preguntara directamente a su hijo ya que posiblemente le iba a proporcionar información más válida y fiable.

De la misma manera, cuando me ocurre alguna cosa extraña, poco frecuente o incoherente suelo preguntar a mi interlocutor por qué motivo se está comportando de esa manera. Incluso ante muchas de las preguntas que me formulan suelo responder con una pregunta. Las personas que me conocen y mis clientes pueden confirmar que suelo tener las palabras ‘por qué’ en la punta de la lengua. Continuar leyendo «Siempre es mejor preguntar que suponer»

Evolución y licantropía

39. evolución y licantropiaHe de reconocer que tenía en mente escribir un artículo bastante negativo, pero que en el último momento he decidido darle un giro no tan pesimista.

Entenderán que dude de la evolución de la especie humana cada vez que veo las noticias. Llámenme romántico, pero siempre había pensado que la evolución de la especie nos haría más inteligentes, compasivos y cooperadores. Con nuestras mejores virtudes al servicio del bien común podríamos erradicar la pobreza y el hambre del mundo, conseguiríamos que todos los niños tuvieran una infancia feliz, que los adultos disfrutáramos de una vida plena y en paz, que nuestra única lucha fuera contra la enfermedad y que nuestro mayor reto fuera mejorar la calidad de vida y el bienestar. Continuar leyendo «Evolución y licantropía»

Máquinas de comprar (falsas y efímeras) emociones

38. maquinas de comprarSomos máquinas de comprar, nos están presionando continuamente para comprar. No te creas que hablo de una teoría conspiranóica, tan solo reflejo la realidad más palpable.

Hace algunos días comí en Barcelona con la única compañía de una televisión. No tenía especial interés en verla, pero era tan grande y tenía unos altavoces tan potentes que no podía hacer otra cosa que mirarla, seducido e hipnotizado. Lo que tiene el slow food es que es lento, lo que me permitió ver muchos anuncios y algo de contenido entre los anuncios. Pero que interesante que me resultó, no os lo podéis ni imaginar.

Si estás bajo de autoestima, de moral o de ánimo hay varios productos que te van a ayudar a subirla. Tan solo tienes que comprarlos. Si necesitas marcar un estatus también. No tienes más que comprarte algunos productos que den fe de tu poder. Si quieres ser un padre guay, pues también, pasas la visa y ya está. Si tienes problemas de identidad aspiracional, pues nada, hay infinitud de productos que te ayudarán. Pero es que incluso, si quieres parecer más listo que los demás por que eres capaz de comprar más barato, también tienes varias alternativas a tu alcance… Vamos, que necesites lo que necesites –y no estoy hablando de productos de consumo- puedes comprarlo.

¿Qué compramos? ¿Cómo compramos? Continuar leyendo «Máquinas de comprar (falsas y efímeras) emociones»