La enfermedad, el sufrimiento o el dolor pueden provocar que una persona pueda llegar a ser tóxica. Normalmente esta actitud tóxica suele ser intermitente coincidiendo con periodos de dolor o de crisis; pero los efectos que tienen estas conductas tóxicas en personas sensibles perduran en el tiempo. Este video nace con la intención de ayudar a todas aquellas personas que están cuidando o comparten la vida con una persona afectada por una enfermedad que le provoca crisis tóxicas.