motivaciones tóxicas (8), ambición

Ambición

Tener una dosis equilibrada de ambición no es malo. Es lícito querer ser mejor, saber más, crecer, querer una vida mejor, más próspera o incluso vivir en una casa mejor. La ambición es uno de los motores de la vida. Ahora bien cuando no podemos conseguir lo que queremos por méritos propios podemos hacer dos cosas, aprender, crecer, esforzarnos o recalibrar nuestras expectativas o… pasarnos al lado oscuro como Darth Vader.

Cuando nos pasamos al lado oscuro nos volvemos personas tóxicas ya que creemos que el fin justifica los medios y que nuestra ambición tiene que ser satisfecha a cualquier precio, con cualquier estrategia, sin importarnos si una persona sufrirá por ello o no.

IMG_0395

Deja un comentario