Siempre es mejor preguntar que suponer

40. mejor preguntarYo defiendo que es mejor preguntar que suponer. Recuerdo el caso de un cliente que me preguntaba el motivo por el que su hijo realizaba determinados comportamientos. Recuerdo como le indicaba que yo no era la persona adecuada para ser preguntada, que le preguntara directamente a su hijo ya que posiblemente le iba a proporcionar información más válida y fiable.

De la misma manera, cuando me ocurre alguna cosa extraña, poco frecuente o incoherente suelo preguntar a mi interlocutor por qué motivo se está comportando de esa manera. Incluso ante muchas de las preguntas que me formulan suelo responder con una pregunta. Las personas que me conocen y mis clientes pueden confirmar que suelo tener las palabras ‘por qué’ en la punta de la lengua. Continuar leyendo «Siempre es mejor preguntar que suponer»

Evolución y licantropía

39. evolución y licantropiaHe de reconocer que tenía en mente escribir un artículo bastante negativo, pero que en el último momento he decidido darle un giro no tan pesimista.

Entenderán que dude de la evolución de la especie humana cada vez que veo las noticias. Llámenme romántico, pero siempre había pensado que la evolución de la especie nos haría más inteligentes, compasivos y cooperadores. Con nuestras mejores virtudes al servicio del bien común podríamos erradicar la pobreza y el hambre del mundo, conseguiríamos que todos los niños tuvieran una infancia feliz, que los adultos disfrutáramos de una vida plena y en paz, que nuestra única lucha fuera contra la enfermedad y que nuestro mayor reto fuera mejorar la calidad de vida y el bienestar. Continuar leyendo «Evolución y licantropía»

Máquinas de comprar (falsas y efímeras) emociones

38. maquinas de comprarSomos máquinas de comprar, nos están presionando continuamente para comprar. No te creas que hablo de una teoría conspiranóica, tan solo reflejo la realidad más palpable.

Hace algunos días comí en Barcelona con la única compañía de una televisión. No tenía especial interés en verla, pero era tan grande y tenía unos altavoces tan potentes que no podía hacer otra cosa que mirarla, seducido e hipnotizado. Lo que tiene el slow food es que es lento, lo que me permitió ver muchos anuncios y algo de contenido entre los anuncios. Pero que interesante que me resultó, no os lo podéis ni imaginar.

Si estás bajo de autoestima, de moral o de ánimo hay varios productos que te van a ayudar a subirla. Tan solo tienes que comprarlos. Si necesitas marcar un estatus también. No tienes más que comprarte algunos productos que den fe de tu poder. Si quieres ser un padre guay, pues también, pasas la visa y ya está. Si tienes problemas de identidad aspiracional, pues nada, hay infinitud de productos que te ayudarán. Pero es que incluso, si quieres parecer más listo que los demás por que eres capaz de comprar más barato, también tienes varias alternativas a tu alcance… Vamos, que necesites lo que necesites –y no estoy hablando de productos de consumo- puedes comprarlo.

¿Qué compramos? ¿Cómo compramos? Continuar leyendo «Máquinas de comprar (falsas y efímeras) emociones»

Complejo de inferioridad

37. complejo inferioridadPero que cansado que es estar siempre comparándose. Ya desde pequeños nos agobian con las dichosas comparaciones. Que si fulanito es tan bueno obediente, que si menganito corre más que tu, que si zutanito esta tan alto y tan guapo, que si perenganito es un encanto…

Yo creo que en algún lugar de la sala de partos y de la sala de espera hay un señor con una cerbatana que dispara unos dardos especiales que inoculan el virus de la comparación. No se me ocurre otra explicación mejor.

Cuando crecemos el tema se complica. Algunos padres te comparan con ellos y proyectan en ti sus frustraciones y aspiraciones. Hijo, tienes que ser abogado, médico, funambulista, nanobiólogo o ingeniero aeroespacial. Ya volvemos a estar liados con un niño al que le traspasamos una responsabilidad que no puede o no quiere asumir. Claro, luego nos extrañamos cuando llega a los cuarenta, le da la crisis y lo deja todo para irse a hacer de maestro de yoga a la india.

También hay padres que te comparan con ellos y que sienten miedo de perder su aparente superioridad. Este es el peor de los casos ya que no puedes ser más alto, más guapo, más inteligente, más querido o más algo que él. De manera más o menos sofisticada se encargará de plantarte la semilla de la inseguridad, su misma inseguridad, en ti, condicionando toda tu vida futura.

Por cierto, no nos olvidemos de los padres que esperan que seas su mejor trofeo. Estos son los más complejos. Te llevan al mejor colegio, a la mejor universidad y a la mejor escuela de negocios. Pero no lo hacen para darte las mejores opciones lo hacen para tener el reconocimiento de los méritos de tu éxito. Tú eres su hijo trofeo, lo mejor que han hecho en la vida. Le debes lo que eres y necesitas pagárselo con creces. Ni se te ocurra abandonar el camino que te han marcado. Que no se te pase por la cabeza no ser un triunfador nato.

Claro luego pasa lo que pasa… que tenemos a millones de personas por el mundo que necesitan sentirse superiores a cualquier precio. ¿Acaso no es terrible tener que compararse continuamente para poder tener una buena autoimagen? ¿Cuánta inseguridad sufrida en silencio? ¿No te parece que es muy triste necesitar una posición de poder para ganar en autoestima? ¿Y que esperas que hagan cuando tengan el poder y la seguridad que necesitan?

Así vamos. Tenemos a miles de personas que necesitan tener poder para mejorar su complejo de inferioridad heredado o provocado generalmente por una educación poco acertada. Una vez instaurados en el poder, sea público, empresarial o social, se dedicarán a ejercerlo con el objetivo de asegurarse su bienestar y su reconocimiento.

Cuidado con los complejos de inferioridad. Cuidado con las personas que necesitan ser reconocidas constantemente. Cuidado con las frustraciones que inoculamos a nuestros hijos ya que pueden desembocar en guerras, maltrato, corrupción, abusos de poder o vejaciones.

Citando a Beethoven –un niño programado por sus padres para triunfar en la música le gustara o no– el único símbolo de superioridad que conozco es la bondad.

Volver a empezar

36. volver a empezar¡Bienvenidos de nuevo! Empieza un nuevo ciclo. Termina otro. ¿Dónde vas a enfocar tu atención? ¿En el que termina o en el que empieza?

Si me permites un consejo, yo siempre soy partidario, puestos a escoger, a mirar hacia delante. Es más, te animo a que adoptes una actitud oportunista que te permita aprovechar la oportunidad que tienes para definir esta nueva etapa acorde con tus deseos e intereses.

¿Cómo va a ser esta nueva etapa? ¿Cómo va a ser tu futuro? Pues en realidad no lo sabes, no tienes ni idea. Nadie lo sabe, porque nadie puede saber de lo que es capaz sin antes haberlo llevado a la práctica. Eres un compendio de virtudes que están esperando la oportunidad para mostrarse y desarrollar todo su potencial. Sí, es cierto, no exagero lo más mínimo. Que no seas consciente de tu potencial no significa que te tengas que sentir pequeño o pequeña. Es más, posiblemente a alguien le interese que te sientas inseguro. Continuar leyendo «Volver a empezar»